Breve historia

Azlor (Aflor, en la Fabla del Somontano), Azohor, Azelor, Azllor, Acelor y Alcelor son los diferentes nombres que recibió desde la Edad Media. Está situado en el Somontano de Barbastro de la provincia de Huesca en el antiguo Reino de Aragón.

Las primeras noticias que se tienen de Azlor (Azelor) aparecen en un documento diplomático del año 1095 por el cual el Rey D. Pedro I de Aragón concede a la Abadía de Santa María de Alquézar los diezmos y primicias de la iglesia de Azelor, dice el documento: Extracto del documento traducido del latín: “ Por otro lado concedo todo el almudenage de pan y de vino, de oro y de plata, de trapso y de todas las cosas”, de las iglesias de (cita varias iglesias del Somontano), entre ellas, Azelor.

En el mes de noviembre del año 1099, en otro documento del mismo Rey D. Pedro I, da una viña a la Abadía de Santa María de Alquézar, y dice: extracto del documento traducido del latín. “ Dono asi mismo una Viña mía que está debajo de los término de Azelor en el valle junto al monte Alkalá”

En el mes de septiembre del año 1101 es nombrado tenente del castillo de Azlor, D. Blasco de Fortuñones, rico-hombre aragonés que se distinguió en la batalla de Alcoraz y fue tenente de la fortaleza de Alquézar. Este rico-hombre estaba casado con Dña. Urraca y tuvieron una hija llamada, también Urraca, que se decía hija de Blasco Fortuñones de Azlor. Probablemente también fue hijo suyo el rico-hombre Miguel de Azlor que aparece junto a D. Blasco de Fortuñones fue Señor de Azlor hasta el año 1137.

Azlor fue villa de realengo hasta el año 1200. El día 8 de enero de 1200, el Rey Pedro II de Aragón dio a Miguel de Resún la villa de Azlor a cambio de otros bienes; después pasó a ser otra vez villa de realengo hasta el 16 de junio de 1336 que el Rey Jaime II la vendió.

Civilmente la villa de Azlor estuvo vinculada desde el año 1488 hasta el año 1834 a la ciudad de Barbastro. Fue sucesivamente Sobrecullida de Barbastro (1488 al 1495); Aldea de Barbastro (1518 al 1610); Vereda de Barbastro (1646); Corregimiento de Barbastro (1711 al 1733); Lugar y Señorío Secular (1785); y desde 1834 Azlor es Ayuntamiento de pleno derecho.

Eclesiásticamente fue iglesia sufraganea de la Abadía de Alquézar y perteneció sucesivamente a los obispados de Roda, de Roda-Barbastro, Tortosa y desde el año 1279 al Obispado de Lérida.

Por el documento del año 1095, ya citado, la iglesia de Azlor se integró como iglesia sufraganea en la entonces Abadia, después Priorato, de Santa María de Alquézar que estaba bajo la obediencia del Obispo de Roda, antes había pertenecido al obispado de Huesca. En el año 1100 después de la Conquista de Barbastro la sede episcopal de Rodase trasladó a dicha ciudad denominándose obispado de Barbastro-Roda. Los obispos de Huesca y Barbastro entablaron unos litigios por los derechos que cada uno de ellos creían tener sobre la iglesia de Alquézar y sus iglesias sufraganeas que duraron casi dos siglos.

En el año 1148 el Príncipe Ramón Berenguer IV esposo de la Reina de Aragón Doña Petronila, conquistó la ciudad de Tortosa creando una nueva sede episcopal, y para dotarla económicamente le donó el Priorato de Alquézar y todas sus iglesia sufragáneas. Además, Ramón Berenguer creyó que cediendo estas iglesias a otro obispado cesarían los litigios mantenidos entre los obispos de Huesca y Barbastro-Roda, pero no fue así, sino que entonces fueron tres los obispos en discordia: el de Huesca, el de Barbastro-Roda y el de Tortosa.

Azlor en sus primeros tiempos fue un pequeño pueblo que se desarrolló al abrigo de su castillo medieval. Debió tener unas cuatro o cinco familias, que luego, fueron aumentando paulatinamente con hombres y mujeres venidos de otros pueblos. Aunque nada se sabe, de cierto, hasta el año 1488 que tenia 18 fuegos (familias), en el año 1495 hasta el año 1609, tenía 28 fuegos; en 1646, tenia 38 fuegos; en 1787, 48 vecinos; en 1797, 131 vecinos; en 1846 hasta el año 1850, tenia 80 casas y 400 personas; en 1875, tenia 597 habitantes y en el año 1970 tenía 278 habitantes.

De las gentes que repoblaron Azlor, muchos de ellos fueron hijos de familias infanzonas aragonesas, que llegaron a Azlor y edificaron sus casales solariegos entre los siglos XV y XIX, creando nuevas ramas de esos linajes.

Azlor fue un pueblo rico y así lo demuestra la fastuosidad de sus edificios civiles, cívico-militares y eclesiásticos. Los edificios civiles fueron grandes casasles-palacios levantados por las familias infanzonas que lo repoblaron, entre los que destacan la casa del Barón con galería de vanos y portalada de arco de medio punto y un precioso alero típicamente aragonés.

Otra muestra de su riqueza son los escudos heráldicos que campean en las fachadas de varios casales de linajes ilustres.

Como edificios cívico-militares se encuadran el castillo de Azlor, ubicado sobre un mitón de piedra que sirvió de torre de vigilancia y de refugio a los habitantes del pueblo en caso de ataques enemigos. Las torres albarrana denominada de Fernahuelo o Farnagüelo de estructura cuadrada que sirvió como torre de vigilancia en el medioevo. Azlor ocupaba una posición estratégica que tenía por misión vigilar y defender el valle de Alfege de las invasiones que venían por el norte.

Edificio eclesiástico por excelencia es la iglesia parroquial dedicada al culto y devoción de Nuestra Señora de las Victorias, es de estilo gótico tardío propiamente aragonés. Su fábrica es de losas de piedra dispuestas a soga con contrafuertes prismáticos, y rematada con arquillos típicos del arte aragonés. En el ábside una ventana de arco apuntado y en su interior destacan sus finas nervaduras formando castones que culminan en un florón central y otros florones más pequeños dispuestos a manera de satélites del primero. Su portada es de estilo renacentista del siglo XVI, de la misma época que la de la Catedral de Barbastro y Azara.